Se pasea una naranja
por la mesa del comedor.
No me mates con cuchillo,
que me da mucho dolor.
Sal, Isabel
siéntate en el sofá.
No quiero, no,
que me va a reñir papá.
Papá no está aquí
que está en el jardín
regando las flores
de mayo y abril.
Una, dos y tres,
sal, niña, que vas a perder.